Dolce & Gabbana Light Blue pour Homme Living Stromboli by Dolce & Gabbana

Esta fragancia de comienzos del 2012 es la parte masculina de un lanzamiento combinado de una nueva versión del par Light Blue de Dolce & Gabana que se inspira en un viaje de descanso a zonas del mediterráneo, con Living Stromboli haciendo referencia a la isla de Estrómboli en el norte de Sicilia, con el nombre del perfume interpretándose como vivir en la ciudad pero también como una forma de vivirla y disfrutarla en carne propia. El envase aprovecha la misma forma de botella del primer perfume Light Blue de hombre creado en el 2007 y que a la vez también había sido establecido por Dolce & Gabbana pour Homme de 1994, reemplazando al igual que su par Dreaming in Portofino el acabado esmerilado y el tono celeste del tapón por acabados transparentes que dejan ver un líquido de color azul, destacando la caja por la imagen de una casa blanca de líneas mediterráneas contra un cielo azul. En el sitio de Dolce y Gabbana ya no figuran referencias a este perfume, por lo que no se cuenta con una lista de sus notas.

En partida la fragancia se apega a líneas ochenteras y masculinas clásicas, con un punto dominante de cedro y ámbar que recuerdan ideas planteadas en algunos Baldessarini, con apariciones esporádicas de cuero y con oscilaciones verdes mediterráneas que se hacen más notorias a los 5 minutos y que se abren a menta y albahaca, sin llegar a pimientas como en la versión original. En fase media a 20 minutos la fragancia mantiene un centro de madera que se vuelve más húmedo y con aspecto de bosque por influencia de un pachulí, manteniendo una base fuerte de ámbar con dejos de agua de lavanda que aporta sensaciones frías y mostrando evoluciones en la capa verde que se enfoca hacia un vetiver afín con las maderas, con puntos suaves de pimienta seca ligeramente alimonada que arrastra vestigios de menta, llegando a 1 hora con una impresión que recuerda una versión de verano muy fresca de L'Instant de Guerlain pour Homme por la incorporación de nuevas maderas ahumadas. Al llegar a 2 horas el aroma se vuelve más licoroso y con efecto de inciensados que se abren a madera y especiados aromáticos tipo jengibre con pimienta no negra, con un punto denso y menos fresco al centro que da un aspecto de turbiedad sucia derivada de pachulí concentrado o de granos de tonka ahumados, con el ámbar abriéndose a 4 horas a resinas fragantes con puntos de anís que recuerdan la edición descontinuada de Casual Friday de Escada de finales de los noventa. A 7 horas el aroma mantiene la mayoría de las características básicas desarrolladas en las horas anteriores, con los inciensados comenzando a perder tibieza de resinas e inclinándose a variantes de madera seca y pachulí que se abren a mentol de vetiver con albahaca y cuero, con el aroma dando un paso breve por alcanfor a las 9 horas, el cual baja al poco tiempo permitiendo repuntes del tono tibio de cedro y ámbar que arrastran ideas de fruta madura y licorosa delimitada dentro de un ámbito de madera y especies fragantes a las 12 horas. En fase final al alcanzar las 24 horas el perfume mantiene las mismas proporciones de madera con ámbar y tintes de anís, con menos presencia de frutales y con un ascenso de un grupo de pimienta verde que se confunde con vetiver, con un punto extra de licoroso que es el que caracteriza al aroma y que parece conformado por restos de resina inciensada y tonka con residuos verdes tipo mentol con alcanfor y pachulí al pino.

Al igual que la versión femenina Dreaming in Portofino que acompaña a este perfume, la fragancia parece dejar atrás las ideas de agua fresca veraniega establecidas por su predecesor en favor de un aroma más denso y clásico que resalta una imagen masculina mucho más clásica que evita llegar a un extremo complejo característico de los años ochenta, rescatando de esta época solo las líneas características en torno a resina y madera, mostrando un comportamiento que en un escenario de diario se siente atemporal e indiferente de las épocas del año, con suficiente frescura para moverse en exteriores frescos. En oficina el aroma llama la atención por la mezcla de resina inciensada que arrastra un punto sucio, pudiendo por momentos sentirse rígido y maduro pero consiguiendo un buen efecto memoria por las referencias a un estilo ochentero dentro de un marco preferentemente semiformal que se vuelve informal y relajado con personalidad a mayor edad, dando una buena impresión y centrando las miradas en reuniones de corbata. En el caso nocturno el ahumado de las resinas destaca en ambientes sucios como fiestas y reuniones en pubs, con cierto ánimo pulcro en eventos informales aunque perdiendo impacto en galas y situaciones más formales al presentar una estructura relativamente simple comparada con otros perfumes más complejos. En lo romántico el aroma causa adictividad a distancia de conversación desprendiendo ideas masculinas con las que se puede diferenciar de una competencia de aspecto más adolescente, pudiendo tener altibajos a corta distancia al dar una impresión más madura o descolocando si se aplica en exceso. Rango de edad entre 25 y 60 años.