Eau de Grey Flannel by Geoffrey Beene

Esta fragancia del año 1996 forma parte de un conjunto relativamente limitado de fragancias creadas por el diseñador de vestuario estadounidense Geoffrey Beene fallecido el año 2004. El perfume toma el nombre de la fragancia emblemática de la marca, Grey Flannel, creada el año 1975 con la intervención directa del diseñador y que traducido al español se lee como "franela gris", que es el nombre de una colección de vestuario del año 1965 en la que Beene innovó con el uso de tela de franela gris estampada. Tanto en el sitio de Geoffrey Beene como en Elizabeth Arden, quien fabrica la fragancia, no se menciona esta edición especial centrándose sólo en el Grey Flanel original y en una segunda fragancia Bowling Green, sin dar las notas aromáticas de Eau de Grey Flannel.

La partida es levemente cítrica neutra, con sensaciones aromáticas clásicas algo conocidas al agua con dejos de especies suaves, con tendencias a enebro o lavanda más una nota extraña con tendencia a origen animal que está entre una civeta y húmedos de musgo de roble. En fase media el desarrollo es clásico levemente inglés, con una base de enebro tenue con lavanda, naranja y tonos verdes. Parece haber una canela de fondo pero sin llegar a determinar un estilo especiado. Aunque el aroma se siente suave al oler directamente en papel, en los alrededores se siente la fragancia aunque sin mostrar niveles intensos ni densos, centrándose dentro del marco fresco que tiene. En fase final el perfume se mantiene suave en papel y con estela ligera alrededor, con más presencia de maderas aromáticas tipo cedro en un cuerpo de agua fresca con musk aromático.

La fragancia tiene una partida bastante clásica y limpia, bastante actual sin sentirse desactualizada o vieja, aspecto que da una buena primera impresión a nivel de oficina como un aroma no intrusivo, semiformal a formal y con estela de mediano rango, sin caer en los aromas típicos al enebro. Sigue tomando buena imagen como aroma de diario inclinado al verano y primavera por frescura, aunque en un estilo medianamente relajado semiformal y con recuerdos de una imagen elegante parecida a la de oficina. El estilo ligero tiene mejor potencial de día, perdiendo terreno como aroma nocturno. Por el lado romántico se siente masculino y no agresivo, aunque algo indiferente a la hora de conquistar y moviéndose en un ámbito de día, más apropiado para una ocasión especial no nocturna con alguien ya conocido y estable. Rango de edad entre 25 y 50 años.