Realiza una Búsqueda

10 La Roue de la Fortune by Dolce & Gabbana

Este perfume del 2009 es parte de una colección de 5 aromas masculinos y femeninos llamada "antología de fragancias de D&G", todos ellos tomando su nombre de una carta del tarot. Esta edición en especial está orientada a un público femenino y se basa en la décima carta del tarot llamada "la rueda de la fortuna", estructurada en un aroma que busca identificar a una mujer con características de jugadora y arriesgada ante la vida. Las notas declaradas por D&G para el perfume son las siguientes: tuberosa, gardenia, jazmín, benjuí y pachulí.

En la partida el aroma es bastante dulce, casi completamente praliné azucarado muy dominante el cual comienza a evolucionar y definirse al cabo de unos 10 minutos en un pachulí con un tono de jabón que parece jazmín. En fase media el pachulí se mantiene como la nota dominante y casi exclusiva, recordando vetas dulces casi de caramelo de Angel de Thierry Mugler e incluso del TL pour Lui de hombre de Ted Lapidus. El aroma tiende a ser lineal y constante por bastante tiempo, con una pequeña sensación entre resina y flores turbias de fondo. En fase final el pachulí se carameliza en un estilo parecido al de algunos Ágatha Ruiz de la Prada, con algunos puntos florales bajos e imprecisos. Hay también algo de resina, pero la mezcla general tiende a un dulce verde de pachulí.

Durante una buena cantidad de su duración la fragancia se mantiene lineal en torno al pachulí, dado pequeños giros hacia el dulce y el caramelo resinoso, en un estilo fresco veraniego tendiendo a un atemporal de inviernos no fríos, de corte diario cotidiano inclinado a lo social por lo notorio de su aroma. En oficina el aroma también es notorio sin llegar a ser intrusivo, con puntos elegantes y profesionales inclinados a un invierno o a espacios de trabajo climatizados, llamativo para una reunión y con un aroma fácil de recordar basado en pachulí y confundible (a favor o en contra) con fragancias de la línea de Angel de Mugler. Como perfume nocturno es llamativo, compensando sofisticación por intensidad constante a niveles semiformales e informales, teniendo un buen desempeño en una reunión de amigos o una fiesta con aire enrarecido. Por el lado romántico el pachulí presenta vetas atractivas y tibias y a la vez frescas que evitan la saturación al oler a corta distancia. Rango de edad entre 20 y 45 años.